Estoy seguro, Dolores, de que está entrada va a generar un debate interesante y es el de la definición de los territorios que cubre cada uno y del valor del servicio prestado.
Como bien lo dices, el cliente va a pedir de todo y lo primero que debe entender (por aquello de las piedras en el tejado) es que si lo quiere todo, tiene que pagar por ello.
Lamentablemente ocurre con frecuencia que algunos profesionales ofrecen ese todo por “dos céntimos y medio” o quizás un poco más, dañando no solamente el techo propio, el de sus compañeros de gremio, sino también mal acostumbrando al cliente a que puede tenerlo todo, pagando poco o nada.
Muy interesante, Dolores. Lo comparto con gusto 😀